martes, 12 de mayo de 2009

Interrupción

El ambiente es denso. La luz tenue. La luz puede ser fría e intensa, pero también caliente o suave. Eso no importa. Lo importante es lo que sabes que está a punto de pasar.

De inmediato, las sábanas se convierten en una envoltura perfecta para lo que el cuerpo está soñando y la mente diseñando.

Puede ser tu enamorada (o), puede ser un amor imposible, puede ser una amistad, puede ser una estrella de cine o de música, puede ser simplemente alguien a quien ves en la calle, y hasta alguien que no has conocido. Pero eso no importa, ya las circunstancias modelan la perfección por unos momentos.

Irrepetible? SI

Todo apunta hacia una final feliz e inevitable

Un flirteo surreal llena tu sueño de esperanza. Y de pronto estás a punto de despertar, pero no quieres. Quieres continuar...

El tiempo pasa y a veces no. Pero lo importante es que esa persona con la quieres estar, está ahí contigo, y sin importar estatus del sueño perfecto, el objetivo lo has sabido desde un principio.

Un beso no es suficiente.

La luz baja un poco más de lo normal, pero ahí sientes a esa otra persona. Tocándote. Es increible cuanto se sienten las cosas que uno quiere sentir en los sueños.

Besos van y besos vienen. La idea es consumar y consumir. Y ser consumido.

Es aquí. Este es el momento cuando te convertirás en el super heroe de un sueño que no es de ciencia ficción. Es una realidad que nunca vas a vivir. Pero eso no lo sabe el que sueña. Lo sabe el que lo ve. El que sueña, está haciendo eso. Soñando. Es algo tan perfecto y tan real que se lo cree. Esto es lo bonito de los sueños. Y el significado de algo traicionero que tu propia mente ha creado.

Tu quitas la ropa, la otra persona te la quita a tí.

Repito, es aquí.

Sientes algo mojado y caliente...
pero no sabes que es...

Y de repente un sonido. Es un sonido que solo puedo comparar, con el que escuchan Eddie, Susannah y Roland en The Waste Lands cuando el oso robótico fallece y anuncia el acabar de su cuerpo.

Es un grito? no

El timbre? no

El teléfono? ojala que no

La alarma de tu teléfono? fuck!

No te queda de otra que pararte, bañarte, vestirte, y recordar el sueño poco a poco mientras el tiempo lo desvanece por lo intangible del asunto. Eso si, si conoces a esa persona, nunca la podrás ver de la misma manera que antes. Al menos por un tiempo.